Livin' la vida Loca

Es tan fácil disfrutar de la vida y tan difícil ser conscientes de ello. Este año se me fue como agua, desechando oportunidades, cerrándome al cambio, dejando todo para después, definitivamente no aproveché este año y no me di cuenta de ello, hasta que vi cerca el final. Pero he abierto totalmente mi mente ahora y empecé por decir 'sí'.

Por ejemplo el fin de semana pasado tuve una boda, estuve a punto de no ir por que tenía mucha gripa y me sentía de la chingada, pero pensé que sería bueno tratar de divertirme un poco en lugar de quedarme acostada viendo televisión. La Boda era en Valladolid así que tuve que trasladarme a 4 horas de Mérida pasando por Chiche Itzá en donde pude ver mucho gringo (léase extranjero) guapo. 

Al final la gripa y una que otra circunstancia como el remodelamiento de la ciudad que hacía que se respirará polvo por todos lados o la presencia de una persona indeseable en mi viaje hizo mella en mí y no disfruté del todo la experiencia, pero lo mejor es que la tuve, es que puedo estar contando esto ahora y que pude tomar fotos, y vi paisajes nuevos, todo por decir sí.

Una semana antes de eso, un día en el que no tenía nada que hacer, decidí salir al centro con mi cámara en la mano y ser una turista más en mi ciudad, gracias a esta decisión vi a una pareja de viejitos alimentando a las palomas, la viejita logró que tres de ellas se posaran en sus manos y otra más comía en la cabeza de su marido, les tomé muchas fotos, y en cuanto me acerqué, un gringo se sentó junto a mi a tomarles fotos también y me sonrió, 

luego me dirigí a los bajos del palacio municipal para darme una vuelta por la feria del libro y compré música de Putumayo,

de vuelta a casa una China estaba vendiendo Pan Chino, que era una especie de taco con carne molida, compré uno y lo comí en el camino, ese día me sentí tan feliz y tan plena con esos detallitos que fue cuando me di cuenta que necesitó vivir más. Ya estoy grande y siento que si no hago algo ahora me arrepentiré por el resto de mi vida.